El glaucoma es una enfermedad ocular crónica que se caracteriza por un daño progresivo en el nervio óptico, que puede llevar a la pérdida irreversible de la visión. El nervio óptico es el que lleva la información visual desde el ojo al cerebro, si se lesiona la información visual no se transmite y el resultado es una alteración en la visión.
Esta enfermedad puede afectar a personas de todas las edades, pero es más común en personas mayores de 40 años, en personas con antecedentes familiares de glaucoma, en personas con miopía y en personas de ascendencia africana.
El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado son fundamentales para controlar la enfermedad y prevenir la pérdida de la visión, porque el glaucoma no tiene cura.
De ahí que los oftalmólogos de la Unidad de Glaucoma de Vithas Eurocanarias insistan a la población en la importancia de realizarse exámenes oftalmológicos regulares paradetectar y tratar el glaucoma a tiempo.
El glaucoma no tiene cura, pero sí se puede ralentizar o frenar su evolución
El tratamiento para el glaucoma depende del tipo y gravedad de la enfermedad. En general, el objetivo del tratamiento es reducir la presión intraocular (PIO) para prevenir o retrasar la pérdida de visión.
¿Cuáles son los tratamientos más comunes para el glaucoma?
Existen diferentes tipos de tratamientos según el tipo y gravedad del glaucoma. A continuación, te detallamos cuáles son:
Tratamiento crónico con colirios
Los colirios reducen la presión intraocular al disminuir la producción de líquido en el ojo (el humor acuoso) o aumentar el drenaje de dicho líquido. El paciente debe usarlos todos los días, de forma crónica, según lo prescrito por el médico.
Tratamiento oral
Los medicamentos por vía oral también reducen la producción de humor acuoso, reduciendo así la presión intraocular. Solo se usan en casos concretos.
Terapia láser
Existen diferentes tipos de tratamiento láser y se elige uno u otro según el tipo de glaucoma que tenga el paciente.
En pacientes con glaucomas de ángulo abierto se puede aplicar la trabeculoplastia con láser SLT. El objetivo del tratamiento es reducir la producción de humor acuoso. En aquellos pacientes con ángulo cerrado normalmente se recurre a iridotomías con láser YAG.
Cirugía
Hay diferentes opciones quirúrgicas. Una de ellas es la trabeculectomía, que se realiza para crear una vía para que el líquido fluya fuera del ojo y se acumule en una ampolla de filtración, reduciéndose así la presión intraocular.
Por otro lado, recientemente se ha introducido el tratamiento mínimamente invasivo conimplante de iStent, especialmente indicado en glaucoma leve-moderado.
Existen otras técnicas quirúrgicas con implantes de drenaje de glaucoma como la válvula de Ahmed o el implante de Paul, y tratamientos con láser diodo continuo o en su versión de micropulsos, que se utilizan en glaucomas más avanzados o casos complejos.
Es importante destacar que el tratamiento para el glaucoma debe ser supervisado por un oftalmólogo especializado en glaucoma, ya que cada caso puede requerir un enfoque diferente. Además, el tratamiento requiere ajustes periódicos para asegurarse de que sea efectivo en controlar la presión intraocular y proteger la visión. Aunque un tratamiento haya logrado controlar la presión intraocular, con el paso del tiempo ésta vuelve a subir y se hacen necesarios nuevos tratamientos. Por esta razón son fundamentales las revisiones, como mínimo cada 6 meses, en cualquier paciente con glaucoma.
¿Cuándo se debe realizar el tratamiento de trabeculoplastia con láser SLT?
El tratamiento con Trabeculoplastia Selectiva con Láser (SLT) se utiliza comúnmente para reducir la presión intraocular en pacientes con glaucoma de ángulo abierto. Se puede considerar el tratamiento con SLT en diferentes situaciones, como las que se describen a continuación.
- Cuando se diagnostica por primera vez hipertensión ocular o glaucoma. En este momento, si el oftalmólogo lo considera adecuado, el paciente puede elegir entre empezar el tratamiento con colirios o realizarse una trabeculoplastia con láser SLT. Si la trabeculoplastia resulta eficaz el paciente logrará tener la presión intraocular controlada durante años sin necesidad de usar colirios.
- Cuando se pretende reducir la cantidad de colirios necesarios para controlar la presión intraocular. La trabeculoplastia selectiva con láser puede reducir el número de colirios necesarios y en algunos casos incluso puede lograr que no sea necesario ningún colirio.
- Cuando la presión intraocular no se controla adecuadamente con medicamentos para el glaucoma. Si el tratamiento con colirios no es suficiente para controlar la presión intraocular, en algunos casos se puede considerar el tratamiento con SLT como una alternativa a la cirugía o como un modo de posponerla.
- Cuando existen dificultades para cumplir diariamente con el tratamiento con colirios.
Es importante destacar que el efecto del láser SLT es temporal y que pasados unos años, generalmente entre 2 y 6, la presión intraocular vuelve a subir. En ese momento se puede optar por repetir la trabeculoplastia con láser SLT o bien por utilizar colirios. Dado que no deja ninguna cicatriz en el ojo, la trabeculoplastia se puede repetir varias veces. La decisión de realizar la trabeculoplastia selectiva con láser debe ser individualizada y basada en la evaluación del oftalmólogo especializado en glaucoma.
Cirugía mínimamente invasiva con implante de iStent ¿En qué casos se utiliza este tratamiento?
El tratamiento con implantes iStent es un procedimiento quirúrgico mínimamente invasivo que se utiliza para mejorar el drenaje del humor acuoso y reducir la presión intraocular. Se suele utilizar en pacientes con glaucoma leve a o moderado y en pacientes con hipertensión ocular.
El procedimiento consiste en colocar un pequeño dispositivo llamado iStent en el ángulo iridocorneal. Al contrario que las cirugías tradicionales de glaucoma como la trabeculectomía, esta intervención no produce la formación de una ampolla de filtración y no requiere puntos de sutura, lo que hace que el postoperatorio sea mucho más sencillo y menos molesto y que sean necesarias menos revisiones postquirúrgicas.
Este tratamiento se suele utilizar en combinación con la cirugía de la catarata, de forma que con una sola intervención logramos la mejoría de la visión que produce la cirugía de cataratas y también la mejoría en la presión intraocular que produce la cirugía de glaucoma. Al operar la catarata en algunos casos podemos optar por implantar una lente que corrija total o parcialmente los defectos refractivos (miopía, hipermetropía, astigmatismo y/o presbicia), disminuyendo así la necesidad de utilizar gafas. La cirugía mínimamente invasiva con iStent también se puede utilizar en pacientes que ya se hayan operado de cataratas para reducir o incluso eliminar los colirios que necesitan para controlar la presión intraocular.