La lucha contra el glaucoma en Canarias ha experimentado un avance significativo gracias a la introducción de la técnica del implante Preserflo. Este tratamiento quirúrgico, una forma de cirugía del glaucoma mínimamente invasiva (MIGS), representa una nueva esperanza para los pacientes afectados por esta enfermedad ocular, que constituye una de las principales causas de ceguera irreversible a nivel global.
El glaucoma, también conocido como el «ladrón silencioso de la vista», afecta a una considerable porción de la población, especialmente a aquellos mayores de 40 años. Tradicionalmente, el tratamiento se ha centrado en la reducción de la presión intraocular para prevenir el daño al nervio óptico. Preserflo emerge como una solución avanzada, eficaz y segura que disminuye la presión intraocular, permitiendo una mejor gestión de la enfermedad y preservando la visión del paciente.
Diseñado con un material innovador y biocompatible, Preserflo se diferencia notablemente de otros dispositivos MIGS por su enfoque ab externo. Al implantarlo, mediante una sencilla técnica, se facilita la salida del humor acuoso al espacio subconjuntival, donde será reabsorbido por las venas epiesclerales, consiguiéndose así disminuir la presión intraocular. Con una longitud de 8,5 mm y un diámetro de 70 micras, el implante destaca por su seguridad y por ofrecer una recuperación más confortable y rápida para el paciente, reduciendo significativamente el riesgo de complicaciones postoperatorias.
La incorporación de Preserflo por Vithas Eurocanarias, que cuenta con la mayor Unidad de Glaucoma del ámbito privado en Canarias, no solo refleja el compromiso del centro con la excelencia oftalmológica, sino también su dedicación a mejorar la calidad de vida de sus pacientes. Este procedimiento innovador subraya la posición de liderazgo de Vithas Eurocanarias en la implementación de tecnologías y tratamientos avanzados en el campo de la oftalmología.
El éxito de la primera intervención con Preserflo en Vithas Eurocanarias, realizada en Tenerife, no solo marca un hito significativo para la clínica, sino que también establece un nuevo estándar en el cuidado y tratamiento del glaucoma en las Islas, promoviendo una visión de futuro donde la pérdida de visión por esta enfermedad pueda ser una preocupación del pasado.