Los niños son susceptibles de tener enfermedades en los ojos, al igual que cualquier persona adulta. Por ello se deben realizar revisiones periódicas para ser poder detectar esos problemas de manera precoz. “Todo problema médico cuanto antes se detecta más fácil será poner una solución”, afirma el Dr.Ángel García, subdirector médico de Eurocanarias Oftalmológica, con motivo de la campaña de concienciación sobre la salud ocular de los niños.
A esto añade que los profesionales de la salud pueden ofrecer consejos de salud pública, como usar gafas de sol. “Si no existe un contacto estrecho entre el paciente y el profesional sanitario estos consejos llegan más dificultosamente al paciente”.
Cuándo comenzar las revisiones oftalmológicas de los niños
El Dr. García indica que la primera revisión ocular debe ser entre los 3 y 4 años, ya que a esta edad la revisión es válida porque el niño colabora y se puede examinar todo el ojo.
“Antes de esta edad sólo están indicadas si hay un motivo que lo justifique como un antecedente familiar clave o que se haya detectado una patología muy evidente a nivel ocular”, explica.
Tras la primera revisión, comenta el doctor, se emplaza a revisiones anuales o bianuales si no hay motivo de preocupación.
Además, añade que es importante cumplir con las revisiones pediátricas desde el nacimiento porque en ellas se realizan unos test que pueden poner en evidencia alguna patología ocular.
Los defectos de graduación y el estrabismo, las patologías más frecuentes en niños
Los problemas oculares más frecuentes en los niños son los defectos de graduación y estrabismo.
“Ambas patologías si no se tratan de manera adecuada pueden desencadenar en una ambliopía, lo que popularmente se conoce como ojo vago”, señala el doctor.
Un ojo vago, tal y como explica el Dr. García, es un ojo que no se ha desarrollado de manera correcta por no tener los estímulos visuales adecuados.
“Si tenemos un estrabismo, un ojo desviado, éste no está viendo de manera correcta lo que impide que el ojo se desarrolle de manera adecuada. Por lo tanto, vamos a tener un déficit visual que si no es atajado en la edad infantil luego va a ser imposible recuperar la visión en el futuro”.
Un defecto de graduación en los menores de 8 años y sobretodo en menores de 5 años debe ser detectado a tiempo para evitar que no se desarrolle de manera adecuada y no consiga tener una visión del 100%, lo que llamamos ojo vago.
Cuando se llega a una edad determinada, que suele ser entre los 8 y 12 años, sin haber tratado ese problema se mantiene una visión limitada en ese ojo para toda la vida. “Podríamos decir que ese ojo que se convierte en vago su 100% de visión no es el 100% de visión de una persona normal, sino que puede ser el 60-70% dependiendo de la patología”.
El Dr. García comenta que las revisiones son fundamentales para evitar el ojo vago en los niños.
¿Conviene revisar los ojos tras las vacaciones?
Durante el periodo vacacional se somete a los ojos a situaciones de estrés, no tanto estrés visual pero sí de estrés ambiental, porque se pasa más tiempo al aire libre y los ojos están más expuestos a irritantes como el agua de piscina, del mar, radiación solar, polvo en suspensión…
Por lo tanto, la superficie ocular está más expuesta y es frecuente que durante el verano se produzcan alergias oculares, conjuntivitis o irritaciones que requieren un tratamiento durante el verano o al final del mismo para empezar el curso escolar de manera adecuada, según comenta el oftalmólogo.
“Al empezar el curso, además, se hacen evidentes variaciones en la graduación que se han producido durante el verano”.
Mala visión y rendimiento escolar
Existe un porcentaje de niños que tienen problemas en clase porque no tiene la visión adecuada.
Apunta el Dr. García que para ver de manera correcta los niños hacen un esfuerzo de acomodación. “Esto se hace evidente en niños que al centrarse en determinadas actividades como leer o dibujar durante un tiempo prolongado empiezan a tener síntomas como cansancio, dolor de cabeza, lagrimeo, irritación…”
Estos son signos indirectos de que puede haber un defecto de graduación oculto, que hace que el niño haga un esfuerzo ocular que debe ser analizado por un especialista.
Nuevo sistema de revisión pediátrica en Eurocanarias
Eurocanarias Oftalmológica ha incorporado el sistema PlusOptix para realizar las revisiones pediátricas.
La ventaja fundamental de este sistema es que es pequeño, compacto y no es necesario que el paciente se apoye, según explica Javier Hernández, óptico de Eurocanarias. “De hecho nosotros debemos estar a un metro o metro y medio del paciente, lo que es fantástico para los niños porque no se invade su espacio”.
Una de las caras de este aparato tiene un dibujo infantil que hace más amable la visita para los más pequeños. Además, le permite al niño estar sentado con su madre, solo o incluso se puede realizar la prueba en la misma sala de espera.
“La prueba es muy sencilla”, afirma el óptico. Tan sólo hay que situarse delante del niño que debe mirar el centro de la imagen que aparece durante unos 15-20 segundos y así se obtienen importantes resultados, como una graduación instantánea no definitiva que sirve de orientación, la distancia interpupilar y una posible desviación de los ejes de mirada.
“Estos datos nos permiten seguir trabajando y realizar otras pruebas necesarias. Es un apoyo importantísimo”, añade.
El óptico señala que esta prueba se puede utilizar en bebés siempre y cuando mantengan la atención de la mirada en el aparato durante el tiempo recomendado. “Incluso puede utilizarse en adultos mayores o con problemas de movilidad para evitar traslados incómodos”.